Todos conocemos el cuento de Caperucita Roja y el lobo, aunque seguro existirán diferentes versiones sobre si al final el cazador mató al lobo o si Caperucita también fue engullida por la feroz criatura.
Caperucita Roja ha cambiado mucho desde que era una niña, ahora es una joven que trabaja como comercial y a la que ningún lobo le toma el pelo. Si de algo le sirvió la experiencia fue precisamente para no volver a caer en las astucias del estafador.
El lobo, Anastasio Dienteslargos, no ha cambiado nada. Aunque hace tiempo que dejó de asaltar los caminos y comenzó a desarrollar otras artes de estafa aprovechándose de las compras por internet.
Anastasio ha intentado engañar a Caperucita haciéndose pasar por otra persona. Falsificó un documento de identidad pero no tuvo suerte. En la empresa de Caperucita han integrado una herramienta para detectar si un documento de identidad es válido o no y que además, certifica el envío de los documentos. De esta manera, Caperucita detectó que Anastasio le había enviado un documento de identidad inválido.
Como este lobo no desiste fácilmente, intentó una nueva treta y le envió un documento de identidad robado. Esta vez, el documento fue aceptado, pero al quedar certificado qué dirección de e-mail envió ese documento, fue más sencillo dar con él ladrón.
Caperucita está realmente contenta con el sistema que ha integrado y con el que se están evitando un 82% de los casos de fraude que tenían, bien por disuasión bien por que atrapan al impostor.
El pobre Anastasio, con el historial que arrastra, pasará unos cuantos años a la sombra.
¡Mira todas sus correrías y escoge el destino de Anastasio!
